28 de marzo de 2006

Sobre la paridad y otras mixtificaciones


Me hace un poco de risa la fruición con la que nos lanzamos a devorar los lemas que nuestros ideólogos ligth nos precocinan. El último de ellos, la paridad, como valor supremo del orden social.

La obsesión por equiparar el número de hombres y mujeres en el parlamento, en los partidos políticos y en los consejos de administración no deja de ser algo artificial. Y yo pienso que la igualdad no es algo artificial, sino totalmente natural. Si por ciertos personajillos públicos fuera, el año que viene tendríamos 6 reyes magos, a razón de 3 hombres y 3 mujeres. Y si vamos en esa línea, yo propongo que las oposiciones a cuerpos de funcionarios del Estado tuvieran una condición: que el número de aprobados se distribuyera paritariamente entre hombres y mujeres; que haya, por decreto, tantas camioneras como camioneros; tantas domadoras como domadores; tantas taxitas como taxistas (vaya, este último ejemplo me ha quedado un poco chuchurrío).

La situación de desigualdad de la mujer perteneció a un tiempo en el que la principal virtud de la persona, que garantizaba la supervivencia y el pan, era la fuerza física. Ahora, que es la inteligencia y la capacidad de trabajo, yo creo que como no espabilemos los hombres nos vamos a quedar algo rezagados. Las mujeres no necestian de políticos oportunistas que a golpe de decreto les consigan la igualdad... ellas conquistarán esos puestos por sus propios méritos. ¿No os parece humillante ocupar un cargo por ser mujer, por completar un cupo?

Y luego, tampoco queramos cambiar a golpe de decreto una inercia de siglos: correremos el riesgo de que el coche vuelque (menosprecio de la maternidad, infertilidad de muchas mujeres que luego -a los treintaitantos- acuden desesperadas a las FIVET, niños desarraigados, sin papá ni mamá, desprecio de las tareas del hogar).

Siento que he sido un poco pesado. Pero bueno, de todas maneras, le dedico este apunte a mi hermana luz. Un beso desde aquí.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tu hermana luz al habla!

Comentario gracioso, sobre todo lo de los reyes magos y las reinas magas y lo de l@s taxistas.

A todos, el tema de la igualdad y de la paridad tiene su complejo... por naturaleza hombres y mujeres somos diferentes, alguien puede negarlo??? más que iguales somos complementarios, ok a esto, pero no por ello las mujeres tenemos que tener menos oportunidades profesionales. Juanxo, estoy de acuerdo contigo en los posibles problemas que esto puede acarrear pero quien dijo que lo que merece la pena fuera fácil?

Saludos muy afectuosos