18 de febrero de 2011

Bonico...



Esta semana dos profesoras de la universidad se han despedido de mi con un cariñoso"hasta luego, bonico". Y claro, uno tiene su autoestima. Bonico es un calificativo amable para un bebé, un ahijado, el hijo de un gorrilla, o incluso una mascota... Pero claro, si uno ya está con la tesis debajo del brazo, publica en Revistas Aranzadi, y es citado en monografías, lo de bonico empieza a resultarle algo inapropiado.


En fin, pienso que parte de la culpa es mía. Si empiezo a ser algo más pedante, a frotarme el mentón cuando escucho a la gente, y a responder de vez en cuando a preguntas con el inefable "sí y no", seguido de un impostado silencio, creo que puedo acabar con esta deriva afectuoso-maternal que amenaza con arruinar mi prestigio académico, todavía en sus albores.


Os tendré al día.

29 de enero de 2011

Atreverse



La idea era peregrina desde el principio, como casi todas las que nos asaltan insistente y febrilmente por la noche y nos impiden conciliar el sueño. Estuvo a punto de sumergirse para siempre en pozo del olvido. Pero me atreví a proponer a los alumnos de Comunicación que hicieran un belén viviente durante la carrera de San Silvestre. Ellos tenían mucho que estudiar y algo de vergüenza que vencer, pero se atrevieron a probar.

Quedó el vídeo que os enlazo. Lo pasaron muy bien y el resultado demuestra que mereció la pena.

Tantas veces se nos ocurren ideas que harían el día a día más alegre, más ingenioso, menos gris... pero casi siempre las arrumbamos en un 'ángulo oscuro', pensando que la vida es más seria que eso, que tenemos cosas más importantes que hacer. Además... ¿y si no sale bien?

Pero hay que atreverse. Así se meten los goles de vaselina. Así se pone en pie al respetable. Así uno se mira una mañana en el espejo y encuentra un brillo desconocido al otro lado del cristal. Qué mal he dormido, pero esa idea de anoche…

25 de enero de 2011

Con que...



Tenemos unos 80 parlamentarios en cada comunidad autónoma (17x60=1020 parlamentarios). Si bien no sería descabellado replantearse su necesidad, máxime con la disciplina de partido que padecemos, mi propuesta aquí es más modesta. Propongo q0ue no hagan nada. Con que no hagan nada nos conformamos, y les seguiremos pagando. Pero que se estén quietos.


Mil tíos con sus asesores tratando de justificar una nómina son capaces de hacer cualquier cosa. Y eso también lo pagamos los ciudadanos, aturdidos por el marasmo de "programas", "formularios", "instancias", "reglamentos", "decretos" y demás parafernalia con los que tenemos que bregar para alimentar la hipertrofia burocrática que lleva camino de devorarnos.


Con que no hagan nada nos basta.


13 de enero de 2011

Misas en la Universidad de Barcelona



Se suspenden las Misas en la Universidad de Barcelona, debido a que estudiantes "progresistas" boicotean la celebración de la liturgia. Leo la noticia en ABC. Una frase de la redacción de la noticia me deja de piedra:

"El conflicto entre estudiantes progresistas y católicos se recrudeció antes de navidad...". Sinceramente, no me imagino una noticia sobre violencia de género en la que se diga: "el conflicto entre el Braulio y Joana se recrudeció...". No hay dos partes iguales en este conflicto. Hay unos personajes (léase energúmenos, antidemócratas, talibanes) que no respetan las creencias de los demás, y unos ciudadanos que tratan de vivir conforme a su conciencia de modo pacífic0, dentro del marco de la Constitución.

Por otro lado, la Universidad de Barcelona en el comunicado que anuncia el fin de los actos litúrgicos hasta que se busquen modos de garantizar la seguridad de los creyentes, afirma que hará todo lo posible para "preservar el ejercicio de los derechos fundamentales (como el derecho a la libertad religiosa y de culto) y el derecho a la libre expresión". Y parece que al hablar de libertad de expresión se refiere a la libertad de los "estudiantes progresistas" de comer bocadillos en la capilla e insultar al sacerdote y a los creyentes.

A uno, claro, se le hiela la sangre ante esa idea de progreso y de libertad. Ante ese doble rasero tolerancia/intolerancia. Y no queda sino entonar un réquiem por esta Europa vieja y automutilada, que se precipita hacia el abismo mientras, eso sí, deja que aún halaguen sus oídos los músicos desde cubierta, que repiten una y otra vez: "paz, progreso, tolerancia, i+d+i".

7 de enero de 2011

Da gusto



Comida, café y paseo con T., al que veo después de cinco meses de Erasmus. Cuatro horas de conversación tranquila, sin prisa, sin nada programado para después.

Da gusto tener amigos sin fronteras. Da gusto los viernes por la tarde. Da gusto escapar de la prisión que tantas veces nos construimos con el reloj, encerrando nuestras almas en cuadriculadas hojas excel.

Que se repita.

2 de diciembre de 2010

Encantar



El verbo encantar es un verbo bonito. Cuando algo nos encanta, de alguna manera nos alegra, nos hechiza, nos enajena. Interesante esa relación entre la palabra "encantar" y el campo semántico propio de los cuentos de hadas, de la magia liviana. Una persona encantadora nos mantiene de puntillas, nos eleva por encima de la prosa de cada día.

Entre tanto ruido y tanto cantamañanas, todos los días podemos descubrir detalles con encanto: un cielo raso con nubes bajas, frías, el michelín de la camarera, echar la quiniela un martes nublado, tomarse un poleo menta bien caliente.

Hay que dejarse encantar, abrirse a la sorpresa y a la magia. Que se mueran los tristes y los agoreros, con su patético aire de intelectuales enteradillos. Hace no mucho le leí al Papa: "escucha bien, tu cielo va contigo".

24 de noviembre de 2010

En el asilo



Con un grupo de estudiantes en un asilo de monjas. Todos muy alegres con sus batas y sus bandejas, dando de cenar a ancianos con alzehimer -pastillas, dentaduras postizas, olor a puré. Al final hubo hasta baile con los abuelos, que con tanta moza joven no sabía exactamente lo que estaba sucediendo. Las monjas, encantadas -como siempre, todo sea dicho. Creo que disfrutaron más y mejor que en cualquier fiestecilla de fin de semana (¿las fiestas no eran para celebrar algo?), con una alegría sencilla, serena, y bastante primaria. Dudo de si ellos mismos se dieron cuenta. No creo que ninguno de ellos repita la experiencia. Qué pena.

10 de noviembre de 2010

La protomoral

5 de la tarde. En un congreso de bioética un estudiantillo de tercero de filosofía perora sobre emociones, valores, principios, Max Weber, la dimensión axiológica, la capacidad estimativa y la protomoral. Inquietante esto de la protomoral. Y no sé si es que a mí me pesan en exceso los dos huevos fritos con patatas que me he comido, y por eso no entiendo nada, o que el estudiante es un pedante hablando de constructos intelectuales tan grandilocuentes como hueros. Pongo cara de interés, me llevo el índice a los labios en actitud reflexiva, entorno los ojos, y me sumo plácidamente en el sopor académico que reina en el salón de actos.
Antes de que me venza el sueño pienso en mi abuela: hay más sabiduría en dos huevos fritos y la siesta que en toda protomoral.