19 de junio de 2010

Sólo contra el mundo




Ayer comiendo con amigos de la academia de inglés, me vi defendiendo el "no" al aborto frente a cinco mujeres. Incómoda posición.

"¿Prefieres que un niño nazca de padres drogadictos y viva debajo de un puente?", me espetó una de ellas. Cambiando de tema, otra afirmó que quiere tacharse de la Iglesia pero que no le dejan. Y otra, que más de la mitad de los Papas habían sido homosexuales, que lo había dicho un amigo suyo. Yo no sabía si reír o llorar.

Así que hoy vuelvo a mi rincón para dejar constancia de mi perplejidad. Esta ausencia de rigor intelectual y de sentido común traen a mi mente negros presagios.

He de aprender a hacer una paella antes de que sea demasiado tarde.