23 de febrero de 2014

Gigas y discos duros



Ayer un amigo vio mi ordenador portátil -ya 6 años, todo un veterano- y me preguntó: "¿Cuánta memoria tiene?" Yo no lo sabía, claro. Fuimos a "Mi PC" y salió una cifra que no recuerdo -fundamentalmente, porque no me interesa. "Vaya birria", contestó. Pues oye, Si tuviera 6.000 fotografías, 10.000 canciones, y 500 películas probablemente me faltaría algo de espacio en el disco duro. Pero no es el caso.

Es más, me parece ridículo el afán que tienen algunos por amontonar en sus ordenadores y discos duros todo tipo de material audiovisual, "por si acaso". Personalmente, prefiero no llevar esa mochila digital. Me muevo más libre.

Puede ser que me falte espacio en el disco duro del ordenador. Pero también puede ser que a mi colega, como a tanta otra gente, les sobre detritus digital.

15 de febrero de 2014

Exhibición de impotencia



El proyecto de Ley del Aborto que impulsa el Gobierno del Partido Popular no va a llegar a aplicarse. Es una pena. El debate es interesante y el texto valiente. Como español, estoy orgulloso de que mi Gobierno esté dispuesto a aprobar un texto como el que se propone, que da marcha atrás a la deriva abortista de la legislación española, acentuada por el señor Rodríguez Zapatero.

Sin embargo, la realidad social y moral de la sociedad española no puede aceptar esa Ley. No su aplicación rigurosa. En un contexto en el que la gente tiene relaciones sexuales de modo irresponsable, desde edades muy tempranas, los embarazos no deseados son decenas de miles. Y ni las personas que quedan embarazadas ni su entorno van a aceptar que la legislación les obligue a llevar adelante su embarazo. Somos demasiado egoístas, demasiado materialistas, demasiado individualistas, como para dejar que un tercero nos entorpezca -9 meses o toda la vida- y nos haga cambiar de hábitos de conducta.

Por ello, el aborto seguirá siendo una lacra social todavía unos cuantos años. Para frenar el aborto hay que conseguir devolver a la sexualidad su sentido y su belleza: entrega total dentro de un compromiso vital. Si el sexo es solo un juego, no se puede pedir un precio tan alto a quien queda embarazada.

Creo que el PP con la reforma pretende ofrecer a algunos de sus votantes una exhibición de impotencia. "Nos gustaría cambiarlo, lo hemos intentado... pero no podemos."

Ojalá me equivoque.

3 de febrero de 2014

Hacer algo ante lo inaceptable



Igual soy un trasnochado, o un antiguo. O no sé, quizá un retrógrado, un reprimido, un triste, un puritano. Quizá estoy atrasado, anclado en los tiempos del nodo.

El caso es que todavía algo se rebela en mi interior cuando, paseando por Valencia, veo marquesinas de Kioskos con mujeres casi desnudas en poses propias de un burdel. Me parece vergonzoso e indecente. Y no sólo por los niños que pueden ver esas imágenes. También por el buen gusto general, la dignidad de la mujer y de su cuerpo, el pudor.

A lo mejor soy al único al que estas imágenes le parecen lamentables. A lo mejor soy un inadaptado a la ola de destape festivo y general. Pues bueno. Aunque lo fuera, me alegro de no acostumbrarme a estas cosas. Más vale solo que mal acompañado. Ya lo decía el personaje de Ionesco a quien tanto he citado, que se negaba a convertirse en rinoceronte: "Aunque me quede solo. Yo no capitulo".

PD. Me he propuesto ir a hablar con los dueños de los kioskos, para quejarme. En otros tiempos hubiera hecho pintadas en las marquesinas... Me da algo de apuro, pero hay que lanzarse. Ya os contaré.